¿Cuál es nuestra misión? Conseguir dar un significado al pan dentro de las obras de arte,fragmentos de obras literarias y dichos populares. Buscad toda la información posible sobre ello y sobre la importancia que tiene el pan en cada entrada y compartidla con los demás a través del blog. ¡Es muy sencillo!

viernes, 16 de mayo de 2014

¡La historia no acaba aquí!

Como bien sabemos, la historia continúa a lo largo del tiempo, por lo que el pan también tendrá un futuro.

¿Cómo crees que será el pan en el futuro? ¿Crees que se le dará la misma importancia que hoy en día?
Muéstranos tu imaginación y danos una idea del pan del futuro. Para ello podrás hacer un dibujo, una redacción o lo que creas que expresa mejor tu idea.

¡Vamos a inventar el futuro!

¿Y ahora qué?

Hemos hecho un breve recorrido por la historia del pan mostrado en el arte y la cultura pero la historia del pan no termina ahí. Hoy en día, el pan es un alimento habitual en nuestra dieta y cuya historia no está finalizada, por lo que debemos continuarla.

Para ello debemos hablar del presente del pan, algo que en mayor o menor medida todos conocemos. Contadnos qué papel ocupa el pan en vuestras vidas, todo lo que se os ocurra y, además, nos gustaría que pudieses aportar algún tipo de información curiosa acerca de nuestro protagonista.

¡Cualquier nuevo aprendizaje es bienvenido!

Los bodegones




En esta ocasión el misterio a resolver es el de los bodegones, retratos de objetos inanimados en los que, numerosas veces aparecen alimentos. Este es uno de los bodegones en los que aparece la figura del pan. De nuevo, debéis investigar para así completar la información sobre el pan en los bodegones. Como guía, tendréis que buscar respuesta a las siguientes preguntas:

  • ¿Cuáles son la datación, el autor y el estilo de este bodegón?
  • ¿Qué puedes decirnos de este autor?
  • ¿Por qué crees que aparece el pan en la obra? Puedes orientarte por la época en la que se sitúa o simplemente echándole imaginación.
  • ¿Podrías mostrarnos más bodegones en los que aparezca el pan?
¡Buscad en todo tipo de medios y documentos, e incluso preguntad a vuestros familiares, amigos, vecinos...!

El siglo de Velázquez


El Almuerzo (1618-1623), D. Velázquez
Aquí tenemos una de las obras de Diego Velázquez llamada El Almuerzo en la que, como bien podéis apreciar, hay tres personajes alrededor de una mesa con varios alimentos, entre los que figura el pan.

Diego Velázquez es un pintor barroco español que nace en 1599 y fallece en 1660. Este siglo, el XVI, está marcado por numerosos acontecimientos bélicos entre España y Francia y también por las reformas que se dieron en el aspecto religioso.

¿Podríais contarnos más acerca de la España del siglo XVI? Y, sabiendo lo que se vivió durante esos años, podréis haceros una idea del significado y valor que tendría el pan en aquella época? Por supuesto, ¡ayúdanos a conocer más en profundidad a Velázquez!

Y esto, ¿de qué se trata?







De nuevo seréis vosotros los que tengáis que investigar sobre qué es esta obra de arte. Para ello os daremos una serie de pistas para que descubráis de qué estamos hablando y qué importancia tiene:
  • Es una obra de arte realizada entre los años 1495 y 1497.
  • Se encuentra en la pared sobre la que se pintó originariamente, en el refectorio del convento dominico de Santa Maria delle Grazie en Milán (Italia).
  • Su autor nació en Florencia, Italia.
¡Una vez más os recordamos que intentéis establecer la relación que el pan guarda con esta obra!


¿De qué se trata?

Pensé muchas veces en dejar a aquel mezquino amo (…) que me tenía ya en la sepultura por hambre (…) Estando con tales penas un día que el ruin de mi amo había salido, llamó a la puerta un caldedero, el cual yo creo que fue un ángel que me envió Dios. Me preguntó si tenía algo que arreglar y yo le dije:
— Una llave de este arca he perdido, y temo que mi señor me azote. Por vuestra vida, ved si en esas que traéis hay alguna que le sirva, que yo os lo pagaré.
Comenzó a probar el angélico calderero una y otra de un gran manojo que traía, y yo le ayudaba con mis flacas oraciones. Cuando de repente, veo el arca abierta con los panes y como dicen, la cara de Dios dentro del arca. Y, abierto, le dije:
—Yo no tengo dineros que daros por la llave, así que tomad de ahí el pago.
Él tomó un pan de aquéllos, el que mejor le pareció, y, dándome mi llave, se fue muy contento, dejándome más a mí.
Mas no toqué en nada en ese momento, porque no fuese la falta sentida, y aún, porque me vi de tanto bien señor, parecióme que la hambre no se me osaba llegar. Vino el mísero de mi amo, y quiso Dios que no se diera cuenta del pan que el caldedero se había llevado.
Al día siguiente, cuando salió de casa, abrí mi paraíso panal y tomé entre las manos y dientes un pan y en dos credos le hice invisible. Luego no se me olvidó cerrar el arca. Y comienzo a barrer la casa con mucha alegría, pareciéndome con aquel remedio remediar de ahí en adelante la triste vida. Y así estuve con ello aquel día y otro gozoso.


Esta vez seréis vosotros los que tengáis que investigar sobre qué es este fragmento. Para ello os daremos una serie de pistas para que descubráis de qué estamos hablando y qué importancia tiene:
  • Es una obra literaria española del año 1554 muy conocida.
  • Su protagonista es un niño.
  • La historia va pasando por nueve amos distintos.
¡No os olvidéis de establecer la relación que el pan guarda con esta obra!

Dichos populares

A continuación tenéis una serie de dichos populares. ¿Qué pensáis que significan? Como siempre, toda curiosidad que encontréis sobre ellos será bienvenida.
  • «Esto es el pan de cada día»
  • «No tengo un trozo de pan que llevarme a la boca»
  • «Pan con pan, comida de tontos»
  • «Mucho pan para tan poca chicha»
  • «A falta de pan, buenas son tortas»


Don Quijote de la Mancha (Miguel de Cervantes Saavedra)

Al polvo y al cansancio que don Quijote y Sancho sacaron del descomedimiento de los toros socorrió una fuente clara y limpia que entre una fresca arboleda hallaron, en el margen de la cual, dejando libres sin jáquima y freno al rucio y a Rocinante, los dos asenderados amo y mozo se sentaron. Acudió Sancho a la repostería de sus alforjas y dellas sacó de lo que él solía llamar condumio (condimento para acompañar al pan); enjuagóse la boca, lavóse don Quijote el rostro, con cuyo refrigerio cobraron aliento los espíritus desalentados. No comía don Quijote, de puro pesaroso, ni Sancho no osaba tocar los manjares que delante tenía, de puro comedido, y esperaba a que su señor hiciese la salva; pero viendo que llevado de sus imaginaciones no se acordaba de llevar el pan a la boca, no abrió la suya y, atropellando por todo género de crianza, comenzó a embaular en el estómago el pan y queso que se le ofrecía.

—Come, Sancho amigo —dijo don Quijote—: sustenta la vida, que más que a mí te importa, y déjame morir a mí a manos de mis pensamientos y a fuerzas de mis desgracias. Yo, Sancho, nací para vivir muriendo y tú para morir comiendo; y porque veas que te digo verdad en esto, considérame impreso en historias, famoso en las armas, comedido en mis acciones, respetado de príncipes, solicitado de doncellas: al cabo al cabo, cuando esperaba palmas, triunfos y coronas, granjeadas y merecidas por mis valerosas hazañas, me he visto esta mañana pisado y acoceado y molido de los pies de animales inmundos y soeces. Esta consideración me embota los dientes, entorpece las muelas y entomece las manos y quita de todo en todo la gana del comer, de manera que pienso dejarme morir de hambre, muerte la más cruel de las muertes.

—Desa manera —dijo Sancho, sin dejar de mascar apriesa—, no aprobará vuestra merced aquel refrán que dicen: «Muera Marta, y muera harta». Yo a lo menos no pienso matarme a mí mismo, antes pienso hacer como el zapatero, que tira el cuero con los dientes hasta que le hace llegar donde él quiere: yo tiraré mi vida comiendo hasta que llegue al fin que le tiene determinado el cielo; y sepa, señor, que no hay mayor locura que la que toca en querer desesperarse como vuestra merced, y créame y después de comido échese a dormir un poco sobre los colchones verdes destas yerbas, y verá como cuando despierte se halla algo más aliviado.

Hízolo así don Quijote, pareciéndole que las razones de Sancho más eran de filósofo que de mentecato.



¡Ahora te toca a ti! Busca información sobre esta obra literaria y el papel que juega el pan en este fragmento. Puedes guiarte por estos aspectos:
  • Datación de la obra
  • Papel de la obra en la historia (importancia que tiene, características, argumento...)
  • ¿Qué importancia crees que tiene el pan en este fragmento? (Opinión personal o información conseguida en los medios)
  • Otros datos que hayas encontrado y quieras compartir. Ya sabes que cuanto más compartas, más aprenderemos todos.